Bolivia avanza hacia el acceso universal a la salud
La Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia establece que el Estado tiene la obligación indeclinable de garantizar y sostener el derecho a la salud, que se constituye en una función suprema y primera responsabilidad financiera[1]. El Sistema Nacional de Salud está constituido por el sistema público, la seguridad social, los servicios administrados por las Iglesias, instituciones privadas con y sin fines de lucro y los prestadores de la medicina tradicional.
El gasto público en salud fue de $US 1.685 millones en 2017, equivalentes a 11.2% del gasto público total y 69.2% del gasto total en salud. El gobierno general financió un 51.7% del gasto corriente en salud en 2017, principalmente a través del Tesoro General de la Nación (43.1%) y con recursos específicos (8.5%). Las empresas y los empleadores privados financiaron el 17.3% del gasto corriente en salud en esa gestión. El gasto público corriente en salud como porcentaje del PIB fue igual a 4.5%. El gasto público per cápita en salud fue de $US 137 por habitante[2].
Ampliación gradual del aseguramiento público
El Seguro Nacional de Maternidad y Niñez se crea en 1996 para brindar prestaciones básicas para mujeres embarazadas y niños menores de 5 años, que luego fueron ampliadas por el Seguro Básico de Salud (1999) y el Seguro Universal Materno Infantil (2002). La Ley 475 en 2013 planteó la atención integral y protección financiera de salud a las personas que no contaban con un seguro incluyendo mujeres embarazadas (desde el inicio de la gestación hasta los 6 meses posteriores al parto), menores de 5 años, mayores de 60 años, mujeres en edad fértil respecto a atenciones de salud sexual y reproductiva; y personas con discapacidad[3].
La Ley 1152 en 2019 amplío la población beneficiaria a todas las personas no cubiertas por la seguridad social, con atención gratuita de salud, en avance hacia un sistema único de salud, universal y gratuito. Como consecuencia de la implementación de estos seguros públicos, el gasto de bolsillo de los hogares se redujo desde financiar un 33.5% del gasto corriente en salud en el año 2000 hasta representar un 21.3% en 2020.
[1] Artículo No.37. Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia.2009
[2] OMS.2018. Global Health Expenditures database
[3] OMS.2022. Global Health Expenditures database