Sudán del Sur, el país más joven del mundo, se ha enfrentado a numerosos retos desde su independencia en 2011. Décadas de conflicto civil, inestabilidad política e infraestructuras limitadas han obstaculizado el desarrollo de instituciones y sistemas sanitarios sólidos. El sector sanitario del país sigue dependiendo en gran medida de la ayuda exterior. El gasto público nacional en sanidad es bajo, un 8,6% del gasto sanitario corriente (GCS) en 2022. [1]
Obstáculos a la financiación sanitaria sostenible
Varios factores dificultan la financiación sostenible de la sanidad en Sudán del Sur.
- Gran dependencia de la financiación externa: Casi la mitad (49,8%) de las CHE[1] está financiada por donantes, lo que crea importantes riesgos para la continuidad y la sostenibilidad
- Movilización limitada de recursos internos: En 2021, el presupuesto sanitario de Sudán del Sur representaba el 2,1% del gasto público general.[1] La escasa capacidad de generación de ingresos del gobierno, agravada por la inestabilidad política y la volatilidad económica, restringe aún más su capacidad para financiar sustancialmente el sector sanitario.
- Capacidad institucional débil: Los problemas de gobernanza y la debilidad de los sistemas de gestión financiera dificultan la asignación y el uso eficientes de los fondos disponibles
- Barreras de acceso e inequidad: La vasta geografía de Sudán del Sur y la distribución de la población rural crean disparidades en el acceso a los servicios sanitarios; y muchos hogares no pueden permitirse pagar de su bolsillo los gastos sanitarios, lo que provoca retrasos en la atención y necesidades sanitarias insatisfechas.
- Crisis humanitaria y carga sanitaria: La actual crisis de conflictos y desplazamientos, combinada con una elevada carga de morbilidad, ejerce una inmensa presión sobre el sistema sanitario, aumentando la demanda de recursos e intervenciones de emergencia a corto plazo y comprometiendo las estrategias de financiación sanitaria sostenibles a largo plazo.
Reformas de la financiación sanitaria para la cobertura sanitaria universal
Para avanzar en la cobertura sanitaria universal (CSU), Sudán del Sur ha puesto en marcha o está estudiando varias iniciativas.
- Fortalecimiento de la atención primaria de salud (APS): Reconociendo la importancia de una atención primaria accesible, el gobierno, con el apoyo de los donantes, ha invertido en el fortalecimiento de las instalaciones de APS en todo el país. La APS desempeña un papel fundamental en la reducción de la elevada carga de morbilidad y es una forma rentable de abordar las necesidades sanitarias.
- Seguro nacional de enfermedad Está en marcha la exploración de mecanismos de mancomunación de riesgos, como los planes nacionales de seguro de enfermedad. El objetivo es complementar la financiación externa y crear un amortiguador contra las crisis repentinas de financiación.
- Asociaciones público-privadas: Para aprovechar los limitados recursos, el gobierno de Sudán del Sur está trabajando para implicar a entidades privadas en la prestación de servicios sanitarios. Esto podría complementar los esfuerzos del sector público en zonas remotas y desatendidas.
- Defensa de la alineación de los donantes con los objetivos de la CSU: Coordinar las actividades de los donantes en el marco de una agenda de CSU podría ayudar a garantizar una financiación sostenible y coherente que se alinee con las prioridades sanitarias nacionales.
Referencias
[1] Organización Mundial de la Salud, Base de datos del gasto sanitario mundial, Perfil del gasto sanitario (elegir país)