En 2012, Nigeria puso en marcha la iniciativa “Salvar un millón de vidas” para mejorar la salud materna, neonatal e infantil. Aplicado inicialmente en 13 estados, el programa pretendía mejorar la generación y utilización de datos para la elaboración de políticas. En 2015, el programa se amplió y se reestructuró con un crédito de 500 millones de dólares del Banco Mundial utilizando el enfoque del Programa para Resultados (PforR), que hace hincapié en la financiación basada en los resultados frente a la financiación tradicional de los insumos.
El reempaquetado SOML-PforR se centró en seis pilares:
- Mejorar la SMNI
- Inmunización sistemática y erradicación de la poliomielitis
- Prevenir la transmisión del VIH de madre a hijo
- Garantizar el acceso a los medicamentos esenciales
- Control de la malaria
- y mejorar la nutrición infantil.
También se abordaron dos factores facilitadores:
- Reforzar la logística y las cadenas de suministro
- y el uso de la tecnología en la prestación de asistencia sanitaria.
Resultados:
El programa incentivaba a los gobiernos estatales en función de sus avances en indicadores sanitarios clave y establecía sólidos sistemas de seguimiento y evaluación. A pesar de los retrasos y desafíos iniciales, el programa registró mejoras moderadas en los indicadores clave de SMNI en 2019. Fomentó una mejor utilización de los datos, la competencia interestatal, la participación comunitaria y las asociaciones público-privadas.