El ahorro compartido es el más prometedor de los incentivos financieros para promover una atención integrada rentable, pero el éxito de su aplicación varía según el contexto.
El artículo “Incentivos financieros para la atención integrada: A Scoping Review and Lessons for Evidence-Based Design”, publicado en el Health Policy Journal, aborda los retos a los que se enfrentan los sistemas sanitarios a la hora de integrar la atención entre proveedores, sobre todo para los pacientes con enfermedades crónicas. A pesar de los esfuerzos de reestructuración, muchos sistemas no consiguen los resultados deseados, a menudo por falta de incentivos económicos. Esta revisión del alcance identifica y evalúa la eficacia de cuatro tipos de incentivos económicos -ahorros compartidos, pagos agrupados, pago por rendimiento y pago por coordinación- basándose en 33 estudios de Estados Unidos y los Países Bajos publicados antes de diciembre de 2021.
La revisión pone de relieve una variabilidad sustancial en la rentabilidad de estos incentivos y subraya la importancia de la infraestructura, como los historiales médicos electrónicos y los canales de comunicación, para el éxito de la implantación.
Los resultados sugieren que, aunque los cuatro tipos de incentivos tienen potencial, el ahorro compartido es el más prometedor para promover la integración de una asistencia rentable. Sin embargo, la escasez de pruebas dificulta la extracción de conclusiones definitivas aplicables a distintos contextos.