Bélgica está apoyando la protección social de la salud en el África subsahariana, especialmente en Senegal, mediante el establecimiento de sistemas de seguros que pretenden mejorar el acceso a la asistencia sanitaria de los trabajadores del sector informal, incluso en entornos difíciles de bajos ingresos.
Bélgica, a través de su agencia de desarrollo Enabel, ha contribuido significativamente a ampliar la protección sociosanitaria del sector informal en los países de renta baja del África subsahariana.
El reciente estudio de caso de la OCDE, “Protección social sanitaria para los pobres: El apoyo de Bélgica en el África subsahariana”, arroja luz sobre cómo los esfuerzos de Bélgica han ayudado a establecer sistemas nacionales de protección social de la salud en países como Senegal, Níger y Mauritania.
En Senegal, la colaboración de Bélgica con el gobierno condujo a la creación de unidades departamentales de seguro de enfermedad, dirigidas a los pobres de las zonas rurales, a las personas que trabajan en la economía informal y a la población indigente.
Estas iniciativas, lanzadas en 2013, cubrieron a más de 400.000 beneficiarios y lograron resultados impresionantes, con un aumento de las tasas de cobertura del seguro de enfermedad del 4% al 80% para 2022.
El sistema de protección social sanitaria ha demostrado su eficacia, cubriendo entre el 85% y el 95% de los costes sanitarios y mejorando el acceso a servicios sanitarios de calidad en una media del 60%, incluso durante la pandemia de COVID-19.
El estudio de caso subraya que el éxito de estos programas depende de un fuerte compromiso gubernamental, una visión clara y compartida con los socios de desarrollo y un marco institucional sólido.
La experiencia de Bélgica en Senegal demuestra que, con el apoyo y la colaboración adecuados, la protección social de la salud es factible incluso en países de renta baja, y ofrece valiosas lecciones para futuras iniciativas en contextos similares.