Se requiere JavaScript

El sitio web de P4H está diseñado para funcionar mejor con Javascript activado. Por favor, actívelo en su navegador. Si necesita ayuda, consulte https://www.enable-javascript.com/

El plan laborista a 10 años para el SNS en Inglaterra: ¿cómo debería ser? - P4H Network

El plan laborista a 10 años para el SNS en Inglaterra: ¿cómo debería ser?

El SNS se enfrenta a importantes presiones, lo que ha llevado al nuevo gobierno a desarrollar un plan de reforma de 10 años destinado a mejorar su viabilidad futura. Aunque los anteriores planes a largo plazo han mostrado resultados de aplicación desiguales, influidos por los contextos político y financiero, esta nueva iniciativa debe dar prioridad a la esperanza, la claridad, la inversión y las estrategias prácticas para un cambio eficaz.

El gobierno del Reino Unido está a punto de crear un plan integral de 10 años para el NHS en Inglaterra, reconociendo una crisis exacerbada por una década de medidas de austeridad, la pandemia del COVID-19 y los errores políticos cometidos desde 2010. Las finanzas públicas están sometidas a importantes presiones y, al igual que muchos sistemas sanitarios de toda Europa, el NHS está lidiando con la escasez de mano de obra al tiempo que se enfrenta a una población cada vez más envejecida y a menudo con mala salud. Estas presiones se han hecho evidentes a través de los graves tiempos de espera para la atención hospitalaria, que causan un sufrimiento real a los pacientes. En respuesta, el nuevo gobierno se ha comprometido no sólo a recuperar los servicios, sino también a “transformar” el NHS para garantizar que esté “preparado para el futuro”.

El próximo plan pretende detallar las estrategias para esta transformación, centrándose en tres áreas fundamentales: aumentar la atención basada en la comunidad, dar prioridad a la prevención de la mala salud y potenciar el uso de la tecnología digital en los servicios. Históricamente, el NHS tiene un historial de formulación de planes a largo plazo. Un ejemplo es el plan hospitalario nacional decenal de 1962, que coincidió con los planes de atención comunitaria. Sin embargo, la iniciativa actual no es una mera repetición del pasado, sino que refleja el reconocimiento de los problemas actuales del servicio sanitario.

Las metas del gobierno reflejan objetivos de planes anteriores, sobre todo el compromiso de trasladar más asistencia fuera de los hospitales. Tres importantes planes a largo plazo elaborados desde 2000 permiten comprender la situación actual. Se trata del Plan del SNS de 2000, la Visión Futura a Cinco Años de 2014 y el Plan a Largo Plazo del SNS de 2019. Cada uno tenía su enfoque y estaba contextualizado por el estado actual de la asistencia sanitaria y las expectativas públicas.

1. Plan del NHS (2000): Marco de gasto destinado a aumentar significativamente la capacidad del SNS mediante más personal, camas adicionales y mejores equipos e instalaciones. Introducción de nuevas normas nacionales centradas en reducir los tiempos de espera para recibir tratamiento. Medidas específicas ampliaron las posibilidades de elección del paciente y reestructuraron la gestión de los resultados, con el apoyo de nuevas asociaciones público-privadas y organismos de supervisión. El telón de fondo de este plan incluyó una crisis invernal en 1999-2000 que provocó importantes compromisos de financiación, lo que permitió al gobierno llevar a cabo un programa de reforma radical para abordar las desigualdades sanitarias de forma integral.

2. Visión de futuro a cinco años (2014): Este plan introdujo nuevos modelos de atención adaptados a una población cambiante, abogando por la integración de los servicios. Preveía el desarrollo de cinco modelos de atención innovadores demostrados en 50 lugares seleccionados. Este plan también hacía hincapié en la salud pública, pidiendo una “actualización radical” de las medidas preventivas. Surgió tras la Ley de Sanidad y Asistencia Social de 2012, que condujo a una reestructuración descendente del SNS, y durante un periodo marcado por una década de austeridad que limitó gravemente el presupuesto del SNS y provocó recortes en términos reales en otros servicios públicos.

3. Plan a Largo Plazo del SNS (2019): En respuesta a un compromiso de financiación quinquenal prometido recientemente, este plan ofrecía una visión de la mejora de los servicios sanitarios durante la próxima década. Los elementos clave incluían abordar los principales problemas de salud, mejorar la atención extrahospitalaria, reducir los tiempos de espera y avanzar en el uso de la tecnología en la asistencia sanitaria. Se hizo hincapié en las asociaciones entre el NHS y el gobierno local para fomentar la colaboración entre los consultorios generales. Sin embargo, se puso en marcha en un momento de crecientes presiones sobre los servicios, con escasez continua de personal y recortes en servicios sanitarios más amplios.

En estos planes a largo plazo han perseverado temas como abordar los largos tiempos de espera, reforzar la atención sanitaria preventiva, coordinar la gestión de las enfermedades crónicas y reestructurar el funcionamiento del SNS. La eficacia de estos planes depende no sólo de su contenido, sino también del contexto más amplio en el que se sitúan. El Plan inicial del SNS se elaboró en un clima económico favorable, impulsado por importantes aumentos de financiación destinados a elevar los recursos del SNS hasta alcanzar los promedios de la UE. Iba acompañado de una estrategia dirigida contra las desigualdades sanitarias e iba acompañado de compromisos más amplios en materia de programas sociales. Por el contrario, los planes posteriores se encontraron con realidades más duras, como las limitaciones crónicas de financiación y los efectos de la austeridad.

Además, el entorno político influye significativamente en el éxito de estos planes. El Five Year Forward View se desarrolló en un periodo caracterizado por graves restricciones fiscales, en el que el presupuesto del NHS estaba sometido a un férreo control, lo que socavó las posibles reformas sanitarias. Además, con la llegada del COVID-19 poco después del lanzamiento del Plan a Largo Plazo del NHS, los logros previstos resultaron difíciles de conseguir, ya que los sistemas sanitarios se enfrentaron a una perturbación sin precedentes. A medida que avancen los trabajos sobre el próximo plan decenal del SNS, será esencial aprovechar las lecciones de anteriores estrategias a largo plazo, al tiempo que se sortean los retos contemporáneos. Las consideraciones clave incluirán el mantenimiento de los niveles de personal, el desarrollo de soluciones eficaces de atención comunitaria, el tratamiento de las disparidades sanitarias y el mantenimiento de la confianza pública.

En resumen, el próximo plan del SNS refleja una oportunidad crítica para adaptar y hacer evolucionar el servicio sanitario en respuesta tanto a los retos históricos como a los emergentes. Centrándose en la atención de base comunitaria, las estrategias sanitarias preventivas y el aprovechamiento de la tecnología, el gobierno se propone elaborar un modelo sanitario que pueda servir mejor a la población, en particular a la que se enfrenta a enfermedades crónicas y a largos tiempos de espera para recibir servicios esenciales. Las lecciones del pasado, combinadas con planteamientos innovadores, tienen el potencial de transformar el SNS en un servicio sanitario más resistente y eficaz para el futuro.

Referencia
Dr. Hugh Alderwick, Phoebe Dunn, El plan laborista a 10 años para el SNS en Inglaterra: ¿cómo debería ser?, La Fundación para la Salud, 14 Feb 2025