La 4ª Conferencia Internacional sobre Salud Pública en África (CPHIA 2025) hizo hincapié en la soberanía sanitaria como elemento esencial para el futuro económico y de seguridad de África, en medio del aumento de las emergencias sanitarias y la disminución de la financiación externa. Bajo el lema “Hacia la autosuficiencia”, reunió a 20.000 participantes en torno a cinco prioridades: La fabricación africana, la financiación innovadora, la transformación de la atención primaria, la preparación para las pandemias y la gobernanza de los datos.
La 4ª Conferencia Internacional sobre Salud Pública en África (CPHIA 2025), celebrada en Durban, llegó en un momento decisivo para el continente, ya que las emergencias de salud pública aumentaron más de un 40% desde 2022. Este aumento se produjo al mismo tiempo que disminuía la financiación internacional, aumentaban las obligaciones de la deuda y se endurecían las condiciones fiscales. Al asumir Sudáfrica la Presidencia del G20 en 2025, África tuvo la oportunidad de reforzar su influencia mundial y articular una voz unificada sobre las prioridades sanitarias. La conferencia, cuyo tema era “Avanzar hacia la autosuficiencia para lograr la cobertura sanitaria universal y la seguridad sanitaria”, reunió a unos 20.000 participantes en representación de gobiernos, instituciones académicas, la sociedad civil y socios internacionales.
Los debates se centraron en el fortalecimiento de la soberanía sanitaria de África como base para una transformación económica más amplia y una estabilidad a largo plazo. Los participantes subrayaron que la autosuficiencia de los sistemas sanitarios es esencial, no opcional, para lograr un crecimiento sostenible y resiliencia frente a las crisis. Cinco prioridades catalizadoras constituyeron el núcleo de la hoja de ruta de África hacia la soberanía sanitaria: impulsar la capacidad de fabricación africana, desarrollar mecanismos innovadores de financiación sanitaria, transformar la prestación de asistencia sanitaria primaria, avanzar en la preparación y respuesta ante pandemias, y garantizar la propiedad y la gobernanza de los datos. En conjunto, estas acciones pretenden fomentar la independencia, la sostenibilidad y el liderazgo dentro del panorama sanitario mundial, garantizando que la salud y la prosperidad futuras de África estén impulsadas por soluciones dirigidas por africanos.






