Se adoptó un plan de reforma del sector sanitario dotado con 849 millones de dólares para mejorar la atención primaria, la atención secundaria, el seguro médico, los productos farmacéuticos, el turismo médico, la fiabilidad, el control de calidad y la sanidad electrónica. El plan se financia con fondos asignados al sector en el presupuesto, subvenciones y préstamos al Gobierno.