El Departamento Nacional de Salud confirma la inminente subida de impuestos para financiar el plan NHI en Sudáfrica, a la espera de la aprobación del presidente Cyril Ramaphosa. El éxito de la implantación del NHI depende de que se garantice una financiación adecuada, lo que sigue siendo un reto.
El Departamento Nacional de Salud ha confirmado que se avecinan subidas de impuestos y otros cambios fiscales para financiar el plan del Seguro Nacional de Salud (SNS), que está a la espera de la firma del presidente Cyril Ramaphosa. El ministro de Sanidad, Joe Phaahla, en respuesta a una pregunta parlamentaria, mencionó que los detalles de la financiación del NHI a través de impuestos, incluido el tipo impositivo sobre los contribuyentes individuales, se introducirán mediante un Proyecto de Ley Monetaria del ministro de Hacienda. Los mecanismos de financiación esbozados en la Cláusula 49 del Proyecto de Ley del NHI incluyen ingresos fiscales generales, eliminación de los créditos fiscales por asistencia médica, impuestos sobre las nóminas y recargos sobre el impuesto sobre la renta. Las disposiciones transitorias especificadas en el artículo 57 del proyecto de ley se refieren a los plazos de aplicación de las leyes del NHI de 2023 a 2028, y se prevé que los cambios fiscales y los mecanismos de financiación entren en vigor a partir de 2026. Los críticos han expresado su preocupación acerca de la viabilidad de la financiación del NHI, con estimaciones que sugieren importantes subidas de impuestos o impuestos sobre las nóminas para recaudar la financiación adicional necesaria. El presidente Ramaphosa ha expresado su intención de promulgar la Ley del Seguro Nacional de Enfermedad, a pesar de los debates en curso y las dificultades que plantea su aplicación y sus fuentes de financiación.