El Informe sobre Taxonomía Sanitaria: The Need for a Common Investment Toolkit, publicado por la Asociación para la Salud y el Desarrollo del G20 y el G7 y sus colaboradores, supone un paso importante en el avance de la financiación sanitaria. Aprovechando el impulso de la resolución de la Asamblea Mundial de la Salud de 2025 sobre financiación sanitaria, el informe introduce un marco innovador para alinear las inversiones de los sectores público y privado hacia resultados positivos para la salud. Al proponer un lenguaje común y un marco de inversión voluntario, el informe aborda una laguna clave en la financiación sanitaria: la creación de un enfoque estructurado para que los gobiernos, los inversores y las empresas integren la salud en las estrategias económicas, financieras y políticas.
El informe destaca el aumento de las inversiones sanitarias privadas tras la pandemia, pero subraya la persistente desconexión entre los sectores sanitario y financiero. Basándose en las entrevistas a las partes interesadas y en los diálogos del G20, pide una definición conjunta de financiación sostenible para la salud y el desarrollo de una taxonomía sanitaria. Se propone una herramienta de este tipo para orientar las inversiones estratégicas, apoyar la sostenibilidad de la deuda e integrar la salud como pilar de la resiliencia financiera y económica.