Eslovaquia perdió en septiembre ante el Tribunal de Justicia de la UE por los continuos retrasos en los pagos de los hospitales públicos a sus proveedores. El retraso medio en los pagos era de 397 días. En medio de las crecientes dificultades de financiación sanitaria de la Compañía General de Seguros Sanitarios, de propiedad estatal, y de desacuerdos sobre las prioridades presupuestarias, la ministra de Sanidad, Zuzana Dolinková, dimitió el 4 de octubre.
El 19 de septiembre, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea dictaminó que Eslovaquia había incumplido su obligación en virtud de la Directiva de la UE (2011/7/UE) que protege a las empresas europeas contra la morosidad. Las entidades públicas que prestan asistencia sanitaria (hospitales públicos y otros tipos de organizaciones) tienen que pagar sus deudas comerciales en un plazo máximo de 60 días naturales, informó Filip Áč de Euractiv. Un informe de la Oficina Suprema de Auditoría eslovaca descubrió un retraso medio en los pagos de 397 días, debido a las graves dificultades financieras de la Compañía General de Seguros Sanitarios (VšZP), de propiedad estatal. Los argumentos del Tribunal de Justicia de la UE son los siguientes:
“De los datos relativos al plazo medio de pago de las deudas por parte de los hospitales públicos en las transacciones comerciales, se desprende que en 2015, 2016, 2017 y desde 2018 hasta el momento en que se presentó el presente recurso, la República Eslovaca ha incumplido continuamente el artículo 4, apartado 3, y el artículo 4, apartado 4, letra b), de la Directiva.”
Se ha informado de que el país ha evitado una multa cuantiosa, pero la Comisión puede volver a los tribunales si el Estado miembro no resuelve la situación. Zuzana Dolinková, ministra de Sanidad de Eslovaquia, comentó anteriormente esta cuestión:
“Se trata de un asunto que lleva mucho tiempo sin resolverse sistemáticamente y que persiste desde 2015. La dirección del Ministerio está negociando intensamente con los Ministerios de Justicia y Hacienda para abordar este asunto. En la próxima reunión del gobierno, presentaré un documento que ofrecerá un análisis exhaustivo e incluirá propuestas y medidas alternativas para resolver la situación.”
Se sabe que la Compañía General de Seguros Sanitarios tiene unas pérdidas previstas para final de año, pronosticadas en 169 millones de euros en julio, pero ajustadas posteriormente a 95 millones de euros. El organismo del seguro de enfermedad está actualmente sin director, después de que su anterior director, Michal Ďuriš, fuera despedido en agosto de 2024. La primera medida para mejorar la situación financiera de VšZP fue una precipitada limitación de determinados procedimientos de un día en los ambulatorios. El seguro de enfermedad rescindió los contratos con algunos proveedores y limitó la cantidad mensual que reembolsaría a otros. El diputado Dr. Tomáš Szalay advirtió:
“La situación financiera de VšZP (Compañía General de Seguros Sanitarios) se ve amenazada por la necesidad de un plan de recuperación, y existe un riesgo real de que no disponga de fondos para pagar las facturas de los proveedores sanitarios. Sus asegurados se enfrentan a la posibilidad de no tener tiempos de espera más cortos, sino más largos”.
En medio de la creciente tensión por el déficit de fondos al que se enfrenta el pagador único del país, el 4 de octubre de 2024, la ministra de Sanidad Dolinková anunció su dimisión. Entre los motivos de la dimisión de la ministra Dolinková estaba la reciente aprobación de recortes presupuestarios por el Parlamento de Eslovaquia, como parte de los esfuerzos de consolidación presupuestaria para reducir el déficit presupuestario en distintos sectores, lo que repercutiría en la sanidad.
El sector sanitario recibiría un recorte de 259 millones de euros, destinados principalmente a los salarios del personal sanitario. En lugar del aumento inicial del 9,7% t en los salarios de médicos, enfermeras, matronas y otros trabajadores sanitarios, sus sueldos crecerían sólo un 3%. Esto provocó el descontento expresado públicamente por la oposición y por sindicatos de trabajadores sanitarios como la Asociación de Sindicatos Médicos y la Cámara Eslovaca de Enfermeras y Matronas. La ministra Dolinková subrayó que la reducción había violado el acuerdo entre el gobierno y los sindicatos médicos sobre los aumentos salariales y compartió lo siguiente el día de su dimisión:
“Considero esta consolidación de las finanzas públicas inaceptable e insostenible para la sanidad eslovaca”.
La Entidad Fiscalizadora Superior de Eslovaquia declaró que, durante el periodo 2018-2023, el Ministerio de Sanidad experimentó nueve ministros diferentes, y la estructura organizativa del Ministerio de Sanidad se modificó significativamente 36 veces.
