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Los gobiernos de todo el mundo se ven sometidos a una presión cada vez mayor para que asignen más fondos nacionales a la lucha contra las enfermedades no transmisibles (ENT), que son responsables de casi tres cuartas partes de las muertes anuales en el mundo. En el reciente Foro de la Alianza contra las ENT, celebrado en Kigali, expertos y defensores debatieron formas de reforzar la financiación en medio del desinterés de los donantes y el aumento de los costes de los tratamientos. Una solución clave es aumentar los impuestos especiales sobre el tabaco, el alcohol y las bebidas azucaradas. Las investigaciones demuestran que aumentar estos impuestos un 50% podría salvar 50 millones de vidas en cinco décadas y generar 3,5 billones de dólares en cinco años para la atención de las ENT. Sin embargo, los grupos de presión de la industria han frenado su adopción.

También se están estudiando estrategias de adquisición conjunta e incentivos para la inversión del sector privado. Algunas organizaciones están trabajando para reducir los costes de los medicamentos creando demanda en mercados desatendidos, mientras que MedAccess está reduciendo los riesgos de la cadena de suministro mediante garantías financieras. Con la próxima Reunión de Alto Nivel de la ONU sobre ENT, los defensores instan a los gobiernos a comprometerse con mecanismos de financiación sostenibles. Un liderazgo y una gobernanza fuertes son esenciales para garantizar un acceso equitativo al tratamiento y mejorar los resultados sanitarios mundiales.