Los impuestos sanitarios sobre el tabaco, el alcohol y las bebidas azucaradas promueven la salud pública y generan importantes ingresos, cruciales para el crecimiento económico y la resiliencia. Si se hacen con eficacia, pueden mejorar mucho la salud de la población.
El último blog del Banco Mundial de su serie “Invertir en salud”, titulado“Impuestos sanitarios inteligentes: Una victoria para la salud pública y la economía”, destaca los principales debates del 7º Foro Anual sobre Financiación Sanitaria. El foro destacó el papel fundamental de los impuestos sanitarios sobre el tabaco, el alcohol y las bebidas azucaradas para promover estilos de vida más sanos y generar importantes ingresos.
Con el crecimiento económico quinquenal más lento en décadas, son esenciales políticas fiscales innovadoras como los impuestos sanitarios. Estos impuestos pueden reducir la carga de las enfermedades no transmisibles y generar ingresos sustanciales, ya que sólo los impuestos sobre el tabaco y el alcohol pueden contribuir hasta un 0,6% y un 0,3% del PIB, respectivamente.
Las estrategias clave incluyen subidas periódicas de los tipos, estructuras de consumo específicas e indexación de la inflación. El blog también subraya la importancia de destinar los ingresos a programas sanitarios y de utilizarlos estratégicamente para maximizar los beneficios.
El enfoque coordinado del Banco Mundial aprovecha la experiencia de diversos sectores para apoyar las reformas fiscales sanitarias en todo el mundo, con el objetivo de construir un futuro más sano y resistente. Para más información, visita la página del blog del Banco Mundial.