Los servicios sanitarios de los centros públicos de Fiyi eran y siguen siendo en gran medida gratuitos y de fácil acceso para la población, con un cobro limitado para determinados procedimientos médicos especializados. Incluso ofrece exenciones de dichas tasas a los pacientes más pobres. Esta evaluación concluyó que los pagos directos eran progresivos porque los hogares con ingresos elevados utilizaban servicios privados y pagaban tasas a los usuarios. Por otro lado, los que tienen peor capacidad para pagar la atención sanitaria soportan la carga de financiación más baja. A día de hoy, el sistema de financiación sanitaria de Fiyi constituye un buen ejemplo de cómo alcanzar objetivos sostenibles de Cobertura Sanitaria Universal.