En 2020, Ruanda gastó el 7% de su PIB y el 9% de su presupuesto total en atención sanitaria. El gobierno y los donantes contribuyeron con el 28% y el 36%, respectivamente, al gasto sanitario corriente (GCS) de Ruanda. Aunque la asignación presupuestaria del 9% a la atención sanitaria está por debajo del umbral del 15% de Abuja, Ruanda ha avanzado mucho en la reducción de los gastos de bolsillo (GOD), que han pasado del 27% en 2000 al 10% del GdC en 2020.
Este logro se atribuye a la exitosa expansión de los planes de seguro médico comunitario (CBHI), que garantizaron a la mayoría de la población el acceso a los servicios de atención sanitaria. El CBHI cubre a más del 85% de la población. En 2020, el 91% de los ruandeses tenía algún tipo de seguro médico. Esto ha contribuido a proteger a los hogares contra los riesgos financieros asociados a la enfermedad.
Todos los datos pueden consultarse en la Base de Datos del Gasto Sanitario Mundial de la Organización Mundial de la Salud.