Las cuentas de salud son una herramienta esencial para controlar el cumplimiento del compromiso adquirido por el Estado y sus socios técnicos y financieros de proporcionar una financiación adecuada a la salud.
La financiación de la sanidad en la República del Congo procede principalmente de seis (06) fuentes: (i) el Gobierno y las estructuras descentralizadas del Estado (Prefecturas y Departamentos), que dedican cada año una parte sustancial de su presupuesto a financiar los gastos sanitarios, (ii) socios bilaterales y multilaterales que prestan un apoyo financiero sustancial a la financiación sanitaria, (iii) Los hogares, a través del consumo de servicios y cuidados sanitarios, (iv) Las empresas, cubriendo los gastos sanitarios de sus empleados, (v) las compañías de seguros que cubren los gastos sanitarios de sus asegurados, y por último (vi) ONG y fundaciones nacionales e internacionales.