El sistema de financiación de la sanidad en Bangladesh está infradotado, lo que obliga a los hogares a incurrir en gastos a cargo del usuario para acceder a los servicios sanitarios. Como resultado, alrededor del 16% de los hogares sufrieron una catástrofe financiera en 2011, el 5% de los hogares no pobres se convirtieron en pobres y el 7% de los hogares bangladesíes experimentaron una financiación de emergencia, como pedir dinero prestado, pedir un préstamo o vender activos para hacer frente a los impredecibles pagos OOP. Este estudio estima la prevalencia y los determinantes de la atención sanitaria a la que se renuncia debido a razones de disponibilidad, accesibilidad y aceptabilidad (modelo de Tanahashi) utilizando modelos multinivel de datos de la Encuesta de Ingresos y Gastos de los Hogares (HIES) 2016-17.
Los resultados indicaban que 1 de cada 4 bangladeshíes había sufrido una catástrofe financiera y que el 14% de la población había renunciado a la asistencia sanitaria por cualquier motivo. Las personas que padecen una enfermedad crónica y tienen un nivel económico más alto son los determinantes comunes de los pagos de los gastos de funcionamiento, la CHE y la atención sanitaria no prestada. La mayor incidencia de CHE se encontró entre los individuos que utilizaron la asistencia hospitalaria (hospital público (56%) y hospital/clínica privada (70%)), seguidos de los individuos que padecían una enfermedad crónica (33%), tenían 65 años o más (34%) y pertenecían a una condición socioeconómica acomodada (33%). Las razones por las que se renunció a la atención fueron: el problema no era grave (58%), el coste (17%), no había nadie que acompañara (5%), la distancia (3%) y el miedo a descubrir una enfermedad grave (3%).
El estudio subraya que las personas con ingresos más bajos, los ancianos y las personas con enfermedades crónicas corrían un mayor riesgo de renunciar al tratamiento debido al coste. La excesiva carga financiera suele hacer que las familias modifiquen su patrón de utilización de los servicios sanitarios. Las personas que padecen múltiples enfermedades crónicas se enfrentan a un empeoramiento de su estado de salud que requiere tratamientos muy costosos.