La pandemia de COVID-19 amenaza con interrumpir los servicios sanitarios esenciales debido a las barreras de la oferta y la demanda. Los modelos matemáticos indican que las grandes interrupciones de los servicios en Níger podrían dejar a 624.400 niños sin antibióticos orales para la neumonía, 974.800 niños sin la vacuna DPT, 78.800 partos menos en los centros sanitarios y 176.900 mujeres menos recibiendo servicios de planificación familiar.
El resultado sería un aumento del 16% de la mortalidad infantil y del 6% de la mortalidad materna en los 12 meses siguientes. Mantener los servicios sanitarios esenciales durante la pandemia de COVID-19 es crucial para prevenir estas consecuencias perjudiciales y proteger los avances logrados en los últimos años en la reducción de la mortalidad infantil y materna.