La infrafinanciación de la salud mental podría resultar muy costosa. El Secretario General de la ONU da la voz de alarma en el Día Mundial de la Salud Mental. Varios meses después, la situación sigue siendo la misma: la salud mental sigue recibiendo menos del 1% de la ayuda sanitaria internacional.
Esta falta de inversión en servicios sanitarios es costosa. Estimaciones anteriores a COVID 19 revelan que cada año se pierden cerca de 100.000 millones de dólares en productividad económica sólo a causa de la depresión y la ansiedad. Mientras que cada dólar gastado en atención a la depresión y la ansiedad produce un retorno de 5 dólares.
El diagrama de este artículo es claro: :
- Financiar la prevención y la intervención precoz
- Mejorar la accesibilidad a los servicios
- Participación de los jóvenes
- Y actuar : particulares, empresarios, gobiernos