Malasia lleva suficiente tiempo dependiendo de la mano de obra extranjera como para plantearse opciones de financiación sanitaria que cubran a este amplio sector de la población que contribuye a su economía. El gobierno ha hecho esfuerzos, por supuesto, en forma de seguro obligatorio de asistencia sanitaria para los trabajadores migrantes, el Plan de Hospitalización y Seguro Quirúrgico de los Trabajadores Extranjeros (SPIKPA), así como ampliando el régimen nacional de seguridad social (SOCSO) a los trabajadores migrantes (antes exclusivo de los ciudadanos). Sin embargo, esto plantea dos problemas. Para empezar, sigue habiendo un amplio sector de trabajadores inmigrantes indocumentados que no pueden acogerse a ningún régimen por falta de datos. En segundo lugar, no hay fondos suficientes para llevar a cabo estos ambiciosos proyectos, por no hablar de la mano de obra y la infraestructura.
Para entender estos retos y buscar posibles soluciones, un equipo de investigadores de la Universidad de Malaya y la Universidad de las Naciones Unidas emprendió un estudio para conocer los modelos de financiación sanitaria en Malasia y la evolución de las políticas de financiación en el pasado reciente.
Se constató que los trabajadores migrantes y los empresarios desconocían la inscripción en el SPIKPA y los derechos que les asistían. Las tarifas más elevadas para los no ciudadanos provocan retrasos en la búsqueda de asistencia. Mientras que el Gobierno malasio casi duplicó los ingresos por tasas de asistencia sanitaria a no ciudadanos, de 104 a 182 millones de RM (de 26 a 45 millones de USD) entre 2014 y 2018, los ingresos pendientes se triplicaron de 16 a 50 millones de RM (de 4 a 12 millones de USD) en el mismo periodo.
La cobertura del SPIKPA es probablemente inadecuada para proporcionar protección contra los riesgos financieros a los trabajadores migrantes, especialmente con el aumento de las tarifas de los no ciudadanos en los hospitales públicos. Se desconocen los trabajadores indocumentados y otras poblaciones migrantes excluidas de la contribución de SPIKPA a los ingresos por tasas no pagadas.
Los problemas descritos con el anterior Régimen de Compensación de los Trabajadores Extranjeros (FWCS), podrían ser parcialmente resueltos por la SOCSO, en teoría. No obstante, sigue habiendo dudas sobre la viabilidad de aplicar elementos del SOCSO, como los pagos recurrentes a los trabajadores y familiares en el extranjero.
Malasia ha tomado medidas concretas para avanzar hacia la inclusión de los migrantes con la provisión de SOCSO para los trabajadores migrantes documentados, pero esto no es suficiente para la verdadera realización de la UHC. El estudio sugiere la ampliación del régimen de seguro SPIKPA para incluir a todas las poblaciones migrantes, al tiempo que se amplía su ámbito de aplicación hacia una cobertura más completa, que incluya la atención primaria esencial.
Para conocer la evolución de las políticas de financiación sanitaria y seguridad social y otras opciones de espacio fiscal para los trabajadores migrantes en Malasia, así como las lagunas y oportunidades para mejorar la financiación y la cobertura sanitaria de los migrantes , lea el artículo completo aquí.
Créditos de las imágenes: Jun Low/Unsplash
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