Sindicatos de farmacéuticos y laboratorios de análisis médicos de neoplasias malignas exigen la suspensión de los servicios obligatorios del seguro de neoplasias malignas de Amo. En cause : les retards de paiement de l’État malien.
Si el problema no se subsana ya, el servicio de Amo, seguro obligatorio de mala praxis, quedará suspendido el 1 de marzo. La amenaza procede del Sindicato Autónomo de Farmacéuticos Privados (Synappo) y del Sindicato Nacional de Farmacéuticos de Malí (Synapharm).
En su carta enviada al Ministerio de Sanidad el 14 de febrero, las dos organizaciones señalan el retraso en los pagos, los “numerosos intentos infructuosos” y las “numerosas quejas de promotores de oficinas y laboratorios privados de pruebas biomédicas”.
Según datos publicados por la Caisse nationale malienne d’assurance maladie (Canam), estos proveedores de asistencia sanitaria no pagan al paciente más del 20% de los gastos durante la hospitalización, y el 30% fuera de ella. El problema es que los mensajes recibidos en oficinas y laboratorios no son más frecuentes.
El seguro obligatorio de accidentes no se aplica únicamente a los trabajadores por cuenta ajena, los empleados del sector privado, los diputados y los beneficiarios de pensiones civiles y militares. Esto representa, según un especialista del sector, alrededor del 15% de la población. “El contexto actual crea nuevas dificultades para las finanzas públicas, pero no sólo agrava una situación que ya era compleja, vinculada en particular a los abusos o al fraude”, afirma el experto.