Henniya mint Teyib es uno de los más de 200.000 hogares que se benefician del Programa Nacional de Transferencias Sociales Tekavoul en Mauritania, que aborda los importantes problemas de pobreza del país, donde casi el 30% de la población vive por debajo del umbral de pobreza. El gobierno mauritano puso en marcha el Proyecto de Apoyo al Sistema de Red de Seguridad Social (PASyFiS 1) en 2015 como parte de su Estrategia Nacional de Protección Social, con el objetivo de crear un modelo de protección social más inclusivo y sostenible.
En 2017, la introducción del programa Elmaouna de redes de seguridad que responden a los choques supuso un cambio importante, al combinar estrategias humanitarias y de desarrollo para abordar mejor las diversas necesidades de las poblaciones vulnerables. La creación de la Delegación General Taazour para la Solidaridad Nacional y la Lucha contra la Exclusión en 2020 amplió aún más los esfuerzos para mejorar la protección social adaptativa, centrándose en inversiones que beneficien a las generaciones futuras.
Un aspecto fundamental de esta iniciativa es la sensibilización dirigida a cambiar los comportamientos y romper el ciclo de la pobreza intergeneracional. Más del 90% de los receptores de transferencias monetarias son mujeres cabeza de familia, y los programas también proporcionan acceso a créditos y servicios sanitarios. Además, el Proyecto de Empleabilidad Juvenil (YEP), iniciado en 2021 junto con PASyFiS 1, ha formado a más de 12.000 jóvenes, de los que el 70% son mujeres, contribuyendo a crear capital humano para las generaciones futuras.
El compromiso del gobierno mauritano es evidente en la expansión del programa: el número de hogares beneficiarios pasó de 47.000 en 2020 a más de 100.000 en la actualidad, y la ayuda económica aumentó de 1.500 MRU (37 $) a 3.600 MRU (90 $) por trimestre. Además, el programa Elmaouna ha apoyado a más de 131.000 hogares durante sequías e inundaciones, y ha ampliado la ayuda a 7.282 hogares de refugiados en el campo de M’berra, beneficiando a más de 40.192 personas, proporcionando así un apoyo crucial a algunos de los residentes más vulnerables del país.
