Kenia ha puesto en marcha una serie de reformas sanitarias que demuestran su intención de ampliar la protección contra los riesgos financieros y la cobertura de los servicios a los grupos pobres y vulnerables. Estas reformas incluyen la prestación de servicios de maternidad gratuitos, la supresión de las tarifas de usuario en los centros públicos de atención primaria y un programa de subsidio del seguro de enfermedad (HISP) para los pobres. Sin embargo, los datos disponibles apuntan a la desigualdad y a la probabilidad de que los pobres sigan quedando rezagados en lo que respecta a la protección contra los riesgos financieros y la cobertura de los servicios. En este estudio, los autores examinaron las experiencias de los pobres con las reformas de la financiación sanitaria dirigidas a ellos.